El oro, tradicional refugio en tiempos de incertidumbre, continúa su escalada imparable y volvió a marcar este miércoles un máximo histórico al situarse en los 3.567,41 dólares por onza a las 17:32 horas (15:32 GMT). Tras el cierre de los mercados europeos, el precio del metal se mantenía en 3.564,85 dólares, con una subida del 0,91%.
El metal dorado no solo superó su récord previo de abril (3.500,10 dólares), sino que lo ha revalidado en varias ocasiones durante la jornada, impulsado por las crecientes expectativas de que la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) pueda recortar sus tipos de interés en la reunión del 16 y 17 de septiembre.
El rally no se limita al oro. La plata también alcanzó nuevos máximos desde 2011 al superar los 41 dólares por onza. Durante la tarde llegó a 41,46 dólares, para luego estabilizarse en 41,18 dólares al cierre de los mercados europeos, con un repunte del 0,73%.
Factores que impulsan la subida
Analistas explican que la volatilidad macroeconómica y geopolítica, junto con la debilidad del dólar, están reforzando la demanda de metales preciosos como activo refugio.
La expectativa de un giro en la política monetaria de la Fed añade combustible a la tendencia alcista, que podría prolongarse en las próximas semanas si se confirman recortes de tipos.
Con información de EFE
