El economista en jefe de BBVA México, Carlos Serrano, consideró que el nuevo Plan Estratégico de Petróleos Mexicanos (Pemex) ofrece un respiro financiero inmediato, pero advirtió que la empresa estatal necesita transformaciones estructurales profundas para garantizar su sostenibilidad y revertir la caída en la producción de crudo.
Durante una conferencia de prensa, Serrano calificó como un paso positivo la reciente emisión de notas precapitalizadas por 12.000 millones de dólares, que permitirá a Pemex cubrir sus vencimientos de deuda de 2025 y 2026. “Estas medidas alivian la situación de vencimientos de Pemex en el corto plazo, pero para una solución estructural hay que aumentar la producción petrolera y eso requiere cambios en el modelo de negocio que aún no se anuncian”, señaló.
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Contratos mixtos y yacimientos no convencionales
El economista destacó como elementos positivos del plan la reintroducción de contratos mixtos con participación privada y el impulso a la exploración de campos no convencionales, en especial de gas natural. Según Serrano, permitir la inversión privada podría atraer capital, elevar la producción y generar ingresos adicionales para el gobierno mediante esquemas de regalías.
“Estos contratos, similares a los de las rondas petroleras previas, asignan un porcentaje muy alto de regalías al Gobierno mexicano. Esto no solo puede ayudar a aumentar la producción, sino también aliviar la presión sobre las finanzas públicas”, afirmó.
Respecto a los yacimientos de lutitas —que requieren técnicas como la fracturación hidráulica o fracking—, Serrano subrayó que la experiencia de Estados Unidos demuestra su potencial: “Hace 15 años había dudas sobre el impacto ecológico, pero hoy existen técnicas que permiten extraer energéticos sin deterioros significativos en temas ambientales y de agua”.
El especialista recordó que estados como Nuevo México y Texas han multiplicado su producción gracias al aprovechamiento de estos recursos. “No hay razón para pensar que México no cuenta con los mismos recursos. Las fronteras no son un tema geológico, son temas políticos, y México tiene un potencial enorme”, concluyó.
El debate sobre el modelo de negocio de Pemex sigue abierto: mientras el nuevo plan atenúa presiones financieras inmediatas, la discusión de fondo gira en torno a cómo diversificar su producción, atraer inversión privada y garantizar la sostenibilidad de la empresa en un entorno energético global en transición.
Con información de EFE
