El presidente argentino Javier Milei anunció este sábado una baja permanente de las retenciones a las exportaciones de carne vacuna y aviar, soja y derivados, maíz, sorgo y girasol, una medida largamente reclamada por el sector agropecuario y que busca mejorar la competitividad del país en los mercados internacionales.
Las nuevas alícuotas establecen una reducción de las retenciones a la carne vacuna y aviar del 6,75% al 5%, al maíz y al sorgo del 12% al 9,5%, al girasol del 7,5% al 5,5%, a la soja del 33% al 26% y a sus subproductos del 31% al 24,5%.
“Estas reducciones redundan en un alivio de hasta 20% en la carga impositiva de las cadenas de granos y del 26% en la de ganado y carnes. Buscamos dar impulso al campo, fuertemente castigado por estos impuestos en los últimos 20 años. Eliminar las retenciones es una obsesión de nuestra gestión y hemos avanzado en esa dirección”, afirmó el mandatario durante la inauguración de la muestra anual de la Sociedad Rural Argentina (SRA).
Impacto esperado en el sector
La Argentina es el mayor exportador mundial de aceite y harina de soja y el tercero de maíz. Solo en junio, el país registró un récord histórico de exportaciones de granos y derivados, alcanzando 23,53 millones de toneladas, según datos de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).
El presidente de la BCR, Miguel Simioni, consideró que la reducción tributaria “marca un rumbo alentador”, destacando que “reducir la carga sobre el campo no solo mejora la competitividad, sino que dinamiza la economía regional, genera empleo y potencia las exportaciones”.
En la misma línea, Gustavo Idígoras, presidente de la Cámara de la Industria Aceitera y el Centro de Exportadores de Cereales (CIARA-CEC), sostuvo que el recorte impositivo “es auspicioso y tendrá un efecto positivo de mayor producción que auspiciamos totalmente”.
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Un alivio fiscal financiado por el superávit
Milei subrayó que la medida se financia gracias al superávit fiscal alcanzado por su administración. “Esto es posible únicamente gracias al superávit fiscal que hemos conseguido y que cuidamos como agua en el desierto ante los embates de la casta política”, expresó el mandatario, quien asumió la presidencia en diciembre de 2023 con la promesa de ordenar la economía, reducir la inflación y equilibrar las cuentas públicas.
Antes del anuncio, el titular de la SRA, Nicolás Pino, había resaltado la disposición del sector a seguir produciendo. “Sabemos qué hacer y nos gusta nuestro trabajo. Solo pedimos que nos dejen hacerlo sin más adversidades que las de la naturaleza, que luego sola se encarga de compensarlas”, afirmó.
Con este cambio, Argentina busca fortalecer su posición en el comercio global de alimentos en un momento de alta demanda internacional y precios relativamente estables en los mercados de granos y carnes. Para el Gobierno, la decisión forma parte de su estrategia de desregulación y estímulo al sector privado, considerado por Milei como un motor clave para la recuperación económica del país.
Con información de Reuters
